Ella está convencida de que es culpable. Él sabe que no lo es. ¿Podrán sobrevivir el tiempo suficiente para demostrar quién tiene la razón?

El ex-agente de Slye, Ryder Van Dyke se enfrenta a una condena por un asesinato que no cometió. Cuando su última esperanza de libertad se desintegra, el FBI ofrece una salida, una pena conmutada, si Ryder ayuda a clavar las uñas a un criminal mortal... su padre.

La analista del FBI, Bianca Brady, quiere justicia por la muerte de su mejor amiga. Ahora todo lo que necesita es una prueba de que el patriarca Van Dyke, es culpable de financiar operaciones terroristas. Ella está dispuesta a hacer todo lo necesario para conseguir que el criminal Van Dyke pague, o al menos eso piensa. Pero hay una trampa.

La única manera de conseguir a un agente del FBI dentro de la familia en la corporación Van Dyke Enterprises es la esposa legal de Ryder. Ryder tiene su propio plan para demostrar su inocencia y sabe como utilizar sus habilidades en las Fuerzas Especiales para desaparecer. Pero secretos mortales, una amenaza a la seguridad internacional y un asesino con una fuerte venganza hacia Ryder le hacen elegir entre dos opciones, renunciar a su libertad o correr el riesgo con la vida de la mujer que le ha robado el corazón.